Bueno, ya he vuelto de nuevo, me ha costado, pero por fín he conseguido encontrar un huequito para sentarme a colgar mi última tarta. Fué un encargo de la seño de Concha, Montse, para regalarsela a su sobrino, que le encanta este personaje animado, y era su cumple. La técnia es de puzzle, puesto que no quería muñecos modelados, sino que fuera la silueta. No cuelgo muchas fotos porque no es una creación muy propicia para ello, sólo tiene una vista, desde arriba.
Los sabores, brownie de chocolate negro, con relleno de ganaché de chocolate blanco y bañado de álmibar de chocolate, ya que el destinatario es un amante empedernido de dicho alimento. Me dió mucho trabajo, tanto el muñeco, porque el fondant no secaba con la humedad, como el bizcocho en si, que no dejaba de escupir relleno, pero todo tuvo un final feliz, puesto que según me comentó la seño, estaba buenísima.
Sobre todo, espero que a Marcos le gustara mucho y se lo pasara muy bien. Gracias, Montse.
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