El mes pasado, me invitó mi amiga, Carmen, a una barbacoa en su casa y entonces pensé: "¿qué puedo llevar?". Pues bien, como ella me había comentado que no sabía qué poner de postre, elegí llevar una tarta, pero tenía que ser sencillita y sin mucha complicación, porque no me quedaba tiempo, ya que lo había decidido horas de la cita.
Para darle un toque distintivo, elegí esas perlas de anís que llevaban las tartas antiguamente y de las cuales, mi tía me había regalado un paquete. No veas si dieron juego y lo que nos reímos...
Respecto a los sabores, brownie de chocolate blanco, con almíbar de brandy y relleno de dulce de leche. La decoración de flores vuelve a pertenecer a la colección de sellos que me ha traído mi madre, la cual, por cierto, fue la creadora de este centro, ya que yo estaba cortándome el pelo.
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